WWE, no era el momento adecuado

El gran protagonista de la noche de SmackDown fue Jeff Hardy. El menor de los hermanos Hardy ofreció el segmento inicial con su detención y cerró el programa atacando a Sheamus. Todo apunta a que el papel de Jeff durante el último programa esta destinado a avivar su rivalidad con Sheamus, pero ni el momento ni las formas fueron las adecuadas. EEUU se encuentra en plena crisis nacional por culpa de una detención, además el pasado con la bebida de Jeff Hardy no hizo más que empeorar la situación. El segmento no sentó bien a la familia de Jeff Hardy, y el propio Matt dejó una critica a la compañía.

La detención

WWE siempre ha destacado por sobre pasar los limites más insospechados. En el pasado llegó a ofrecer segmentos de necrofilia, algo impensable en la actualidad. Sin embargo, los tiempos han cambiado y la compañía podría haberse quedado anticuada. La situación actual no permite sobrepasar ciertos límites tal y como antes se hacían y parece que la WWE no se ha dado cuenta.

EEUU esta instaurada dentro de una grave crisis nacional por el asesinato de George Floyd a manos de una policía mientras lo reducía. La situación en algunos de estados de EEUU entre manifestantes y policías no es la mejor del mundo, por lo que seguramente no fue un acierto por parte de la WWE ofrecer una detención en directo en SmackDown. Por mucho que sea un producto de ficción, la situación social igual no era la recomendada para ofrecer ese segmento.

La embriaguez de Jeff Hardy

No se puede decir que Jeff Hardy haya sido un santo durante su carrera en el mundo de wrestling. El menor de los Hardys ha perdido grandes oportunidades por sus problemas personales, algo que ha tratado de solucionar poco a poco y que parecía haber solucionado. La WWE ya utilizó a Jeff y su pasado problemático en el pasado con una rivalidad con CM Punk al contrarrestar los dos estilos de vida y ahora parece que quiere volver a utilizarlo.